Ciertamente
era complicado caminar entre toda aquella muchedumbre. Aún así trataba de
abrirme paso, creía que ya estaba llegando al final pero no era así. Comencé a
fijarme en los rostros de aquellos que me rodeaban, no eran más que caras
conocidas. Sin embargo no trataban de ayudarme, si no todo lo contrario. Todos
aquellos en los que confié ahora se encontraban en mi contra.
Cuaderno digital de Elena Díaz
martes, 26 de mayo de 2015
domingo, 10 de mayo de 2015
La cocina del microrrelato 4.
Siempre me había dicho que aquellos de los que se dice que "están ahí arriba" tienen ligeras pinceladas de amnesia. Siempre prometiendo cosas que no pueden cumplir, tratando de orquestar según su conveniencia. Él estaba cansado de todo esto, era impertérrito y estaba dispuesto a cambiarlo.
martes, 5 de mayo de 2015
La cocina del microrrelato 3.
Durante el chaparrón veraniego esperaba impaciente a que aquel chico tan conocido por su afán por fanfarronear llegase. Mientras aguardaba intentaba ampararme de la lluvia bajo la marquesina.
Realmente era incongruente que yo estuviera ahí esperándole después de todo lo que había pasado entre nosotros.
Realmente era incongruente que yo estuviera ahí esperándole después de todo lo que había pasado entre nosotros.
lunes, 4 de mayo de 2015
domingo, 26 de abril de 2015
La cocina del microrrelato 2.
Quizás aquel amanecer fue sucinto, pero holló dentro de mí como si fuese el más largo del universo. Tanto que aún puedo sentir en mi tez los rayos de aquel fulgente y antológico Sol.
domingo, 19 de abril de 2015
La cocina del microrrelato 1.
Aquella chica, con su inmaculado rostro pero ímproba mirada,
en la que ya nadie en nuestro viejo pueblo confiaba, hablaba con un joven de
aspecto inocente al que estoy segura que trataba de sacar algún chismorreo. Era
inequívoco, le había conseguido embaucar. Y como acostumbra a hacer, se fue con
viento fresco a cumplir su papel de correveidile oficial.
domingo, 29 de marzo de 2015
Creación nº3: Las andanzas y desventuras de Ed Sheeran
Me presento a vuestra merced como Edward Christopher Sheeran, aunque soy más comúnmente conocido como Ed Sheeran.
He decidido empezar desde mi más
tierna infancia, en la que por nada del mundo imaginé a dónde iba a llegar todo
esto.
Viví con mis padres y hermano en
Inglaterra, en la que a corta edad, comencé a cantar en la iglesia a la que
asistía y también aprendí a tocar la guitarra. Descubrí que ésta era mi
verdadera vocación y que no quería hacer nada más, pero tardé un tiempo en
empezar a tomarme la música enserio. Sabía que tan sólo había una probabilidad
entre mil de triunfar en ese mundillo.
Me mudé a Londres. La calle, el metro y los sofás de mis amigos
fueron mi hogar al principio. En esa etapa me definía como un sedentario, y en ese tiempo escribí algunas de mis canciones más exitosas.
Empecé a evolucionar y
comencé a actuar de pub en pub a diario, llegando a repetir el mismo show hasta
tres veces la misma noche. Tuve, vuestra merced, que aprovechar al máximo mi faceta de ligón
para conseguir convencer a las camareras y que me hiciesen un hueco entre los demás artistas.
De vez en cuando
colgaba videos en YouTube y empecé a ser conocido, mi primer amo, un productor,
me descubrió por esto y mi carrera comenzó a ascender sin pausa.
He hecho colaboraciones
con numerosos cantantes con gran tirón mediático, y también he escrito
canciones para otros tantos, cosa que me ayudo a ser aún más conocido.
He de decir que algunos
de estos “famosillos” eran increíblemente insoportables, tuve que reescribir la
misma canción 7 veces porque dicho famoso “con gran carisma y conocimiento
sobre la música” estaba muy seguro de que la canción no estaba a su altura y le
faltaba… “ese toque mágico”. Pero no me quejo, con lo que gané me fui de
vacaciones.
En la actualidad he
sacado varios discos, con los que he conseguido ser número 1 en ventas en más
de 14 países. Me siento orgulloso de poder decir que ahora mi escenario no es
un pub o una estación de metro londinense, sino estadios del nivel del O2 Arena
de Londres, o el Madison Square Garden de Nueva York. Aunque siempre echaré de
menos mis humildes comienzos y la ayuda que me brindaron mis amigos.
Y ha de saber vuestra merced, que hasta aquí llega el caso, así llegué donde estoy ahora. Y es por
esto que despierto pasión y odio.
Nunca entenderé por qué siempre que salgo
de casa hay alguien esperando. Ya sabe vuestra merced, que yo sólo soy un tío de 24
años que quiere ir a tomarse unas hamburguesas con sus amigos.
Y creo que realmente no soy consciente
de todo lo que tengo, pero sé que puedo perderlo todo, que mis fans se pueden
ir, sé que puede acabar antes de lo que pienso.
Toda mi vida ha sido una montaña rusa que no hacía más que subir y subir, y no sé cuánto más ascenderá, sólo sé que cuanto más suba más fuerte será el descenso.
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